La confraternidad médica
Este extraordinario documento, cuya autoría se le debe al prestigioso cirujano del Hospital José María Vargas Dr. Luis Razetti, dedicada a sus discípulos, quienes serán futuros médicos venezolanos, trata de la Deontología o Ciencia de la moral y de los deberes u obligaciones morales en sus propios términos Razetti, inicia su escrito con la frase: “el objeto de la medicina es hacer el bien y que todo lo que en el ejercicio de nuestra profesión pueda desviarnos de las practicas del bien es inmoral”. Hace referencia a los médicos de la historia tales como Hipócrates y Celso, Galeno y los Arabes y todos sus sucesores hasta nuestros días. Se refiere al ejercicio de la medicina como una forma obligatoria de honradez para poder comprender la verdadera bondad hacia los semejantes y que esto es un privilegio y que su misión es verdaderamente hermosa que es la esencia misma de la profesión. Señala que la relación entre la sociedad y los médicos está basada en un convenio fundado en la honorabilidad profesional y los intereses de los enfermos, cuyos principios están consignados en el código de la ética profesional, obedeciendo a una Ley Orgánica y un Código de moral médica que ha sido universalmente aplaudido por Congresos Internacionales. Dada la imperfección de los hombres esta profesión tan consagrada presenta una debilidad, la de ser muchas veces ejercida como un comercio, violando hasta el secreto médico y velando por los intereses personales de los galenos, único fin del industrialismo médico. Presenta la defensa del gremio médico y cita algunas opiniones sobre conservar la confraternidad entre los colegas y el respeto profesional entre ellos. Hace mención a la Cruz Roja Venezolana, como una de las instituciones mas altruistas y nobles de la Nación dedicada al beneficio del pueblo. Así como del Hospital Vargas, lugar donde se han salvados muchos enfermos en muy difícil estado de salud, demostrándose en los profesionales médicos una verdadera vocación.