Voz y presencia de Bolivar
El autor dedica estas palabras al Padre de la Patria “Simón Bolívar” celebrando su natalicio el 24 de julio de 1944; en el Liceo Peñalver, en estas lineas rinde homenaje a quien es símbolo y brazo de la libertad de un continente, expresa decididamente que “celebrar el recuerdo de Bolívar no es rendir culto frio a una vida prodigiosa que se hundiera en la noche de la historia.” Iragorry nos habla sobre el valor y significado que adquiere la memoria de este insigne hombre “fuente inagotable de motivos para el canto heroico”, con profunda preocupación nos advierte sobre quienes han buscado en el ideario de nuestro Libertador falsas posturas que permitan cubrir intenciones nada patrióticas, egoístas y su culto no pasa de mera palabrería , nos invita a rechazar la figura encuadrada en el silencio esotérico, la figura llevada a cimas inaccesibles, al culto falso y pobre que solo ha logrado distanciar a Bolívar del Pueblo.